Revista Digital de Literatura y Crítica Literaria

        
FRANCISCO VÉLEZ NIETO
EL CANGREJO PISTOLERO O ANTONIO GARCÍA VILLARÁN

Francisco Vélez Nieto

 

 

 

 

Uno puede, siguiendo la senda de Voltaire, no estar de acuerdo con la poesía y El Cangrejo Pistolero conocido también, con papeles en regla, como Antonio García Villarán; pero por otra parte, sin duda o reparo alguno,  sí reconocer su incansable e inmensa capacidad creativa. Un pronto con el que imaginar y recrearse tirando de gatillos ligeros, conciente de estar “Sólo ante el peligro”, independiente que se case o no se case con la chica cuaquera que suspira.

 

Para Cangrejo Pistolero “La poesía no es una plumita/ que agitas con un soplo” Este gatillo  ligero zamarrea la poesía con provocación y constante golpear crítico, abriendo heridas, contrastes y desvaríos. Todo ello revestido de un humor de dos pares de narices, la de Cangrejo y Villarán, jugándose ambos el tipo en un cuadrilátero muy propio donde el tongo y los masajes no  tienen cabida.

 

Así es y lo señala el título de este cuarto libro que recomiendo sin pudor alguno y comisión, modelo “Reurbanización de suelo no urbanizable”, al son de “otra de mariscos” con hipoteca marca nacional de  Gran Reserva de Occidente. Es decir España.

 

 Es una escritura verso-prosa que utiliza el desenfado para decir lo que madura, consciente de que le pueden tirar a matar los poetas considerados “serios”. Aunque él no va contra los poetas “serios” sino contra todo aquello que suele dormir incluso a las cabras. Esto cuando bien es sabido  cuanto le gusta a  la cabra una pared para restregar su pellejo.

 

A algunos, siguiendo la senda de Voltaire, la poesía de Antonio García Villarán, también conocido como El Cangrejo Pistolero, les puede parecer facilona. Creo que es todo lo contrario. Es poesía meditada y elaborada en acertada sintonía con las imágenes de buen dibujante que le dan sombra a los versos. Lo que sucede es que es muy provocativa y parece al pronto desordenada. Mas es pura laboriosidad con mucho de desmistificadora. “Indios sin oeste, / ni norte, ni sur, ni río bravo/ cazamos bisontes por inercia/ sabemos morir matando/  nunca comemos las sobras, / así somos los pieles rojas”

 

Se define el poeta como de  esa legión que tanto preocupa, ahora, a quienes la crearon y engendraron. Y es que: “Somos la generación del todo fácil sin demanda. / Somos la generación sin hora de llegada, /  el trípode de 5 piernas, la cúspide sin poetas” Son versos que tienen su enjundia en estos poemas en negro que titula Perro Oeste. Y es que de intenciones provocadoras y realistas este pistolero del verso está bien surtido Y termino copiando un terceto de auténtico realismo sevillano.

 

 “Sevilla es una ciudad

de más de un millón de cofrades

Según las últimas estadísticas…”

 

Y no me digan que estos versos se parecen en ira a los  hijos de Dámaso Alonso.