Revista Digital de Literatura y Crítica Literaria

        
JOSÉ GARCÍA PÉREZ

José García Pérez

Cartel Feria Málaga 2010

Abrid el baúl de los objetos olvidados y depositad en él los fármacos y las deudas acumuladas durante la crisis económica que no vio Zapatero, verted en su fondo el zumo de las envidias y desengaños. Alejad con ritos sagrados los fantasmas del sueño y aburrimiento, preparad con bálsamo de corredores de fondo los pies adormecidos por los lunes al sol. Poned vuestros cuerpos bajo la ducha de la alegría y que ella riegue las arrugas de la mediocridad. Sazonad con especia de picardía vuestras carnes, quebrad el candado del alma y que el misterio de la ciudad que todo lo acoge y todo lo silencia, Málaga, alumbre la sombra de vuestras vidas.

 

         Trinitarios y percheleros, capuchinos y  espíritus de la Coracha, jóvenes libertarios, ancianos, paleños, gentes del Compás, gitanos de la Cruz Verde y Los Negros, vecinos de Huelin, amigos del Gran Vía, pandas de los Montes, vecinos de Maqueda y Campanillas, cofrades con castañuelas y timbales, curas y monjas, putas y gays, políticos y locos, chiquillería que grita y llora al unísono, gorrillas y mozas, el cielo y el infierno os esperan.

 

         La noche va a terminar de ser. Todo será luz y alarido que en mil estallidos de candela van a estallar. Brinquemos con el rapapié, bebamos la pólvora almacenada en los ficus, prendamos la mecha del chupinazo del pecado, que bajen las estrellas y ruede la girándula: la traca está preparada.

 

         Nos temen los puros, cautos y vírgenes sin mácula. Se encienden lamparillas por nuestra salvación eterna y se rezan rosarios en los claustros. Antorchas camino del Seminario alumbran las estaciones del vía crucis.

 

         Sacad los trajes de lunares, el sombrero de ala ancha, encended en el cuenco de la mano la llama de la hospitalidad, rebautizad Málaga, la ciudad, la tierra, la locura y el jolgorio.

 

         Hoy es la cita, el reencuentro, el preludio de una semana sin descanso. A las doce de la noche, hora de brujas y misterios, será el regocijo, la celebración solemne del instante, el jolgorio de los cuerpos apretujados desposeídos de pudor.

 

         Que un beso cubra Málaga como un sol. Es feria, la nuestra, la mejor.