Revista Digital de Literatura y Crítica Literaria

        
JOSÉ ANTONIO SANTANO

José Antonio Santano

Ed. Vaso Roto

Hugo Mujica

 

 

 

 

 

Una vez más, y por gentileza de la librería Nobel, la poesía es protagonista en este particular salón de lectura. En esta ocasión el libro seleccionado lleva por título «Del crear y lo creado. Poesía completa 1983-2011», de Hugo Mujica, que viene a ser el primer volumen de los tres que ediciones Vaso Roto dará a conocer de la obra de este poeta argentino. Contiene este libro otros diez: Brasa blanca (1983), Sonata de violencelo y lilas (1984), Responsariales (1986), Escrito en un reflejo (1987), Paraíso vacío (1993), Para albergar una ausencia (1995), Noche abierta (1995), Sed adentro (2001), Casi en silencio (2004), Y siempre después el viento (2011).

         Cuando uno se acerca por vez primera a la poesía de Hugo Mujica tiene la sensación de abismarse en el silencio de la palabra misma, como si dentro de ella y a través de sus ojos pudiéramos ver y palpar el propio espacio del silencio, sucumbir ante su desnuda belleza, sentir su leve soplo de caricia o sumergirnos en los fondos marinos de su ardiente voz. La palabra es el centro, el perverso juego de su alquimia nos seduce y nos advierte de la grandeza de su magia («amanece / la palabra sobre el silencio»). La palabra convertida en grito de silencio que se busca en el otro, la alteridad como único deseo de ser, de ahondar en la oscuridad de la luz o permitir su luz oscura como el verdadero camino hacia la vida que muere día a día («he de morir de tanto inútil,  / he de morir de palabras»). El hombre y el poeta frente a frente, redescubriéndose y rebelándose ante su propio silencio: «soy el deseo de dios muriendo carne, / soy carne deseándose dios»; ambos ante el dolor o el sufrimiento ajenos, atentos a los asombros y los desgarros: «de tantos desgarros / voy a coserme otro cuerpo / para dar de comer / a mi sombra. / también fuera de las venas hace sangre», insistiendo en esa búsqueda del otro, en el silencio del otro: «Me parezco a mí en el querer ser otro del que soy. / En la soledad me sobro: en eso nos dolemos (yo y no ser yo)». El poeta proyecta sobre sí mismo el pasado, sus formas y sus sombras, y vuelve a ser el niño que fuera: «Llueve / y el jardín huele a infancia, / a cercanía de todos los milagros, / a ausencia de todas las memorias», para volver al canto, al aria: «La voz, no el silencio, / es la desnudez de las palabras», y se confiesa: «El poema, el que anhelo, / al que aspiro, / es el que pueda leerse en voz alta sin que nada se oiga. / Es ese imposible el que comienzo cada vez, / es desde esa quimera / que escribo y borro». Es el hombre y el poeta, al unísono, recorriendo el espacio del silencio y la palabra, es el temblor de la travesía: «El viaje más / lejano / es el sosiego, a él vuelven todas las cosas, / como el hambre vuelve al pan / y el azul al azul más profundo». El poeta se pregunta y se responde a sí mismo, y manifiesta ante su obra: « es casi como ir dejando escalón a escalón, libro a libro, el pasado, y, a la vez, haciéndolo presente: poder entregarlo: como tentativa Poesía Completa. No me cabe a mí juzgar mi obra, o sí, en verdad publicar ya es un juicio, es creer que algo vale, vale transformarlo en otros, darlo a leer… No sé más, eso sí, sé que siento: ¡infinita gratitud!, gratitud ante quien acoja mi vida, poema a poema, y gratitud que la hagan vivir más allá de mí, que eso es lo que el lector devuelve al autor». Poesía mística, metafísica, del silencio: «en el silencio el silencio habla», la que nos ofrece este gran poeta argentino, Hugo Mujica, en este primer volumen de su obra completa.