Revista Digital de Literatura y Crítica Literaria

        
Edición de José Ignacio Díaz Fernández
(POESÍA COMPLETA) COLECCIÓN: CLÁSICOS ANDALUCES Edición de Fundación José Manuel Lara y FUNDACIÓN UNICAJA

Fundaciones LARA y UNICAJA

                    

         Como miembro de una poderosa familia nobiliaria, el prócer granadino Diego Hurtado de Mendoza (1503-1575) estuvo al servicio de Carlos V en calidad de embajador de Italia. Allí creció su prestigio de humanista en contacto con los mejores hombres de letras, al tiempo que se llegaba a convertir en incansable indagador de la cultura clásica, coleccionista de antigüedades  y poseedor  de una magnífica colección de códices.

 

         Por la amplitud de sus intereses vitales, la obra poética de Hurtado de Mendoza difiere notablemente de las de Boscán y Gracilaso, contemporánea en el inicio de su trayectoria.

 

         En la lírica extensa y desigual de la tradición española se asiste, en efecto, a un variado proceso integrador de la tradición española y el italianismo en géneros, técnicas y materias. Junto al virtuoso cultivo del octosílabo destaca la experimentación innovadora con la que aclimata, entre otras formas, el terceto encadenado tanto para la epístola moral horaciana como para la poesía satírica y burlesca.

 

         Poeta petrarquista, creó también un importante conjunto de epístolas cuajadas de detalles y emociones más próximas que las que concedía esa estética dominante, a la que transgredí en las dos vetas más apreciadas hoy de su escritura: las burlas y el erotismo.